Pangi y las Kollalla
Duración: 35 minutos
Adaptación y Dirección Escénica: Yerko Tolic
Dirección Musical e interpretación: Tanja von Arx
Traductor, Narrador y Músico: Víctor Cifuentes
Arreglos Musicales: Fernando Muslera
“Hace no mucho tiempo a este lugar, se vino a vivir una familia wingka...
Ellos trajeron enormes camiones y ruidosas motosierras.
Como jamás se había visto, cientos de caminos y claros
aparecieron en los bosques
Rukapillan
Epew (cuento) que narra la historia de un enorme Pangi (puma) que al no encontrar su alimento habitual, se ve obligado a bajar del cerro y se mete en una casa no mapuche que encontró sin sus moradores. Al regreso de la familia a su casa, se encuentran con el puma, causandoles un gran temor. La familia sale del lugar en búsqueda de ayuda y después de varias peripecias, son las kollalla (hormigas) las que aceptan espantar al puma. Finalmente, el canto de tregvl (un treile) desde lo alto de un árbol, nos entrega a todos una enseñanza.
“Pero, quién, quién se ha metido en la casa del gran puma
Tristeza no les da el gran puma”
El treile
Realizamos una propuesta escénica, multimedia y trilingüe (mapuchezungun, español y suizo) inspirada de una narración viva del Puma y las Hormigas. Pertenece al acervo de la oralidad mapuche del territorio wenteche. Fue recuperado por el artista mapuche Víctor Cifuentes. Este trabajo integra: narración, actuación, visuales, canto e interpretación de música en vivo con instrumentos mapuche y clásicos: kultrung, pvfvllka, tvrompe, flauta tiwanaku, violín, viola y cello.
“La familia wingka anduvo harto rato, de un lugar a otro,
sin encontrar a nadie que pudiera solucionar el tremendo y voraz problema.
Ya cansados y casi perdiendo toda esperanza,
se sentaron sobre unas piedras a llorar”.
Narrador
La historia apunta a comprender la urgente necesidad de respetar y cuidar la naturaleza y, desde luego, a todos los seres que la componen, como base de la armonía y bienestar de toda la comunidad. Para nosotros, tiene un claro sentido crítico frente a la depredación de los bosques nativos, principalmente, por parte de las empresas forestales y que es causa directa hoy en día de la bajada de los pumas.
En origen la creamos para el formato audiovisual en el 2020, con el patrocinio de la Asamblea de Teatristas de Los Ríos y financiado por el Programa de Fortalecimiento de la Identidad Regional, SEREMI Cultura de Los Ríos.
Teatro y Narración Oral para la Identidad Cultural
“La alegoría resuena claramente con el conflicto histórico que sigue aún vigente hasta hoy por la ocupación indebida de las tierras mapuche de esta zona austral,
así como también nos interpela a los y las espectadoras respecto a las formas de relacionarnos con los territorios que habitamos y con la naturaleza.
La obra, por su parte, está construida a través de una mixtura virtuosa de lenguajes,
símbolos y técnicas provenientes de la cultura occidental, europea y chilena,
y aquellas que participan de los modos de ser y hacer de la cultura mapuche”
CONSTANZA ALVARADO ORELLANA / Asamblea de Teatristas de Los Ríos, OCTUBRE 2020
La pandemia del 2020 nos imposibilita circular presencialmente, empujándonos a crear o migrar nuestros trabajos al formato audiovisual. En este contexto tan adverso, colaboramos con una iniciativa en asociatividad con otras compañías de la región. Y nos comprometemos a producir un trabajo nuevo, dirigido con especial interés a los estudiantes de E. Básica de la Escuela Rural Mantilhue Alto de Río Bueno y la Escuela Particular de Tafrún Chico de Panguipulli; en su mayoría niñas y niños mapuche.
En una visita a casa del peñi y artista multidisciplinario, Víctor Cifuentes, le pedimos que compartiera un cuento de su tradición familiar y nos relató Pangi. Esa versión, fue la base para el crear Pangi y las Kollala. Dimos paso a un trabajo de análisis, diálogo y reflexión intercultural, dado que los códigos narrativos del teatro contemporáneo, el audiovisual y los de la oralidad mapuche, son distintos en muchos aspectos.
También visitamos el Parque Nacional Villarrica para observar, respirar y tomar imágenes que inspirarán el trabajo para crear la atmósfera visual. Entre conversaciones y cantos, decidimos producir una serie de imágenes en acuarela que fueran parte de la narración.
De forma paralela, trabajamos en la música integrando acervos, sonidos e instrumentos occidentales y mapuche. Combinamos la improvisación, las creaciones de Víctor, con el estudio de la obra de Béla Bartók. Establecimos nexos y Tanja propuso pensar en la posibilidad de que las niñas y niños de las escuelas pudieran tocar la música en vivo, acompañando una función presencial del montaje en el futuro.
Con estos elementos, decidimos mezclar la narración con la actuación, diégesis y mímesis, multiplicando la voz narrativa, aprovechando la participación del peñi Víctor y la nacionalidad europea de Tanja. Y el trío se completa con la proposición del personaje narrador central, Rukapillan: el milenario volcán Villarrica, con su manto blanco, que no estando dormido, todo lo mira y lo sabe, jugando el rol de narrador omnisciente.
El resultado, una puesta en escena que combina músicas, narraciones, visuales y actuación alegórica. La realización audiovisual estuvo a cargo de Rolando Carileo, la grabamos en un día, en el Centro Cultural Bailarines de Los Ríos (Valdivia). Pero, su edición duró semanas, porque Rolo al conocer lo que estábamos haciendo, nos propone trabajar con la técnica de la “pantalla verde”, así aprovechar la fuerza de las imágenes creadas.
(Más información en el Material de Mediación Artística y Pedagógica Pangi y las Kollalla. ¡Solicítalo!)